De acuerdo con los propietarios de empresas en la entidad, el gobierno estadounidense advirtió que a partir del viernes 1 de agosto se aplicará un impuesto del 30% a los productos provenientes de México.

Los empresarios recordaron que, al igual que con el tomate, cuyo arancel fue del 17%, la imposición de impuestos no sólo afecta a México, sino también a Estados Unidos, que depende de muchos productos mexicanos para abastecer a su mercado.

Aunque reconocieron que la medida podría golpear fuertemente al sector exportador sinaloense, los empresarios consideran que la amenaza es una estrategia del gobierno estadounidense para presionar y negociar con México en otros temas.