Una fuerte situación se vivió la noche del sábado 18 de octubre en un vagón del sistema Metrorrey, tras el partido entre Rayados y Pumas en Monterrey. Una mujer protestó por el uso mixto del llamado “vagón rosa”, espacio usualmente reservado para mujeres, al ver que era ocupado por decenas de aficionados, en su mayoría hombres.
La inconformidad escaló cuando la joven presuntamente amenazó con activar el freno de emergencia, lo que provocó tensión entre los pasajeros. Incluso, otras mujeres —aficionadas al club de futbol— la confrontaron y empujaron del vagón.
Metrorrey aclaró que el “vagón rosa” solo opera de lunes a viernes hasta las 10 de la noche, por lo que el sábado no tenía carácter exclusivo. La medida de habilitarlo como mixto fue tomada para agilizar el servicio ante el flujo masivo de personas tras el partido.
¿Era necesaria la violencia utilizada?
