Economistas locales mencionan que, hay un fenómeno social alrededor de estas prestaciones y es que, debido a la oferta y la demanda generada en la temporada las personas tienden a una necesidad de mayor gasto, lo que da pie a afectar la capacidad de gasto individual.
Planeación financiera: clave para no caer en excesos
Hay estrategias para evitar ser parte de la estadística de esta problemática y, si bien no es posible bajar precios, sí es viable efectuar la compra anticipada por lo menos un mes antes.
Suárez Estavillo resaltó que, los programas de descuentos que se han realizado en noviembre son beneficiosos al menos en ese sentido, evitar bajas a las operaciones de las empresas y a su vez atajar los gastos abruptos que se pudieran dar en diciembre.
“Uno de los primeros elementos que se tendrían que tomar en cuenta es, la lógica del consumo anticipado. Una cuestión de generar un presupuesto que de alguna manera a ti te permita ir previendo desde septiembre, octubre e incluso desde noviembre”
Indicó que se pueden sumar estrategias como el reciclar cajas de regalos, tanto con familia así como con vecinos, esto para evitar gastos hormiga que se van en dichos materiales.
Aguinaldo inteligente: pagar deudas antes de gastar
Al respecto de en lo que se deberían usar los ingresos extra decembrinos, añadió que en una lógica económica estos se deberían aplicar en pagar deudas y poder lograr en la medida de lo posible tener salarios íntegros y así evitar un placebo financiero.
“Los ingresos extras como lo pueden ser el ahorro, como lo puede ser el aguinaldo, van para pagar deudas siempre, debería ir en ese sentido; todos tenemos deudas, el sistema de alguna manera nos ha llevado a ese punto”