En un mundo donde casi todo se hace con pantallas verdes y efectos digitales, todavía existe una técnica que mantiene la magia del cine con creatividad y mucha paciencia. Se trata del stop motion. De acuerdo con el especialista en cinematografía, Iván Páez, esta técnica consiste en mover objetos o muñecos milímetro a milímetro, tomando una foto por cada movimiento.
Luego, al juntar todas estas fotos, como por arte de magia, se crea la ilusión de que el personaje cobra vida.












