El Santuario de Culiacán es un templo con una historia de más de 120 años, es una iglesia que a principios del siglo 20 era un recinto eclesiástico de la gente acaudalada, señalan historiadores.
Años después de su construcción vino la revolución mexicana de 1910, y el santuario fue utilizado cómo refugio por los soldados, tras la embestida de los revolucionarios afirman los cronistas.
Expresaron que en esos años, durante el conflicto armado, la iglesia fue vandalizada por los civiles armados, y actualmente se alcanzan a distinguir los impactos de bala en la fachada del templo.